Todo el mundo tiene sus momentos más destacados de las vacaciones de invierno. Para algunos, es ver el encendido del árbol de Navidad de Rockefeller, ver Una historia de Navidad o el regreso de un comercial de televisión memorable.
La vida útil de un anuncio de televisión es relativamente corta, entre seis y ocho semanas, cuando se emite por primera vez. Pero algunas campañas son tan efectivas para captar la atención de la audiencia y encapsular el espíritu de la marca que pueden durar años.
«Se está convirtiendo en una sensación de acontecimiento que las marcas ven como entidades culturales en nuestras vidas, en lugar de publicitarlas», afirmó Dom Boyd, director general de Kantar UK Insights and Marketing Effectiveness Practice.